Desde hace bastante tiempo hemos incorporado en nuestro arsenal terapéutico la tecnología láser transdérmica. Nuestras plataformas de trabajo poseen varias unidades de este tipo, que cumplen diferentes objetivos. El que nos interesa destacar en esta oportunidad, es el Láser Nd-YAG 1064 de pulso ancho y alta potencia. Una herramienta fundamental para la excelencia en el tratamiento de telangiectasias (arañas vasculares) y várices reticulares. Permite tratar la raíz del problema y es prácticamente indoloro, a diferencia de otros tipos de láser que actúan superficialmente y que producen molestias.
Este tipo de láser debe ser utilizado por médicos con alto grado de especialización, NO son juguetes y pueden generar graves daños, si no son correctamente manejados.
Sin esta tecnología es imposible llegar a los vasos sanguíneos que se encuentran a mayor profundidad en la piel o inmediatamente por debajo de ésta. Sin poder eliminar las raíces del árbol que conforman las arañitas vasculares, no es posible realizar un tratamiento definitivo. Tratar solamente los vasos más superficiales, equivale a una poda y no a una solución definitiva.